Kanazki Jiro es un joven de 32 años que ha querido ser piloto de la formula 1, así que en Europa después de meter la pata, se regresa a Japón con la ilusión de volver a correr de nuevo, para esto llega a la casa donde fue criado encontrándose con que su padre adoptivo lo ha convertido en un orfanato y a el no le gusta para nada los niños, así que como no tiene un lugar a donde ir, se queda, y va con su antiguo entrenador a que lo dejé volver a correr, como si fuera tan fácil su entrenador al no querer y tener un piloto joven prometedor.
Es rebajado a ser mecánico, el propósito del jefe es que madure, sabiendo que realmente tiene potencial para ser corredor.
En medio de esta situación el espectador se verá involucrado no solo en lo que le pasa a Jiro y ser piloto de la formula 1, sino que también en el transcurso veremos la vida de estos niños de todas las edades además que sensibilizarán a Jiro, haciendo que recuerde que su vida de niño tampoco no fue nada fácil.
Una historia interesante que no solo tiene el deporte como premisa sin que también vemos la contraparte de problemas reales hacia niños que viven en este ofarnáto que su padre adoptivo ha creado.
Lo que más me llamo la atención es que esta serie no con lleva un tema cantado por algún grupo japones o instrumental, esta va acompañada de una canción del grupo de Rock Aerosmith, llamada Angel, que es una canción muy buena y romántica.
Aunque ha decir verdad no se de que manera interpreto japón esta canción por que a la letra no se parece nada a lo que vemos inmerso en la trama.
Muy buena, no es aburrida en lo absoluto.
Para 11 capítulos creo que todavía tenía mucho jugo por donde sacar a través de las problemáticas que tienen en ese orfanato llamado Kaze no Oka. Pero si esta buena por que compagina tanto romance, como cosas de la vida real y que para niños de orfanato me imagino que son cosas muy similiáres o hasta peores que pueden haber vivido.
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